Nick es un ejecutivo que comprueba como la promesa de su despreciable superior de un importante ascenso se desvanece por puro capricho suyo; Dale asiste aterrado a la toma de poder del nuevo propietario, un joven indeseable que ha traicionado los nobles afanes de su padre; finalmente, Kurt es un ayudante de odontólogo que es sometido a una permanente presión sexual por su jefa justamente cuando está a punto de casarse.
Un argumento que invita a las equivocaciones que van sucediéndose y nos llevan a un final previsible. Buenas actuaciones, diversión irregular, a veces te sonríes otras te ríes abiertamente, pero hay momentos de vulgaridad que no me agradaron. Prescindible.
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